Estaba viendo Girl, Interrupted? Creo que no, se que era una de Winona Ryder, pero no era esa. Era una en la que le vendían a alguien un programa para MTV estilo reality show y salía Keanu Reeves siendo uno de esos oficinistas idiotas ramplones. No tenía mucho que había llegado a mi casa. Estaba felíz como hacía mucho que no estaba. Tu presencia me daba mucha tranquilidad, pero sobre todo, me daba confianza. Aún así esa noche en particular no te extrañaba.
Ya no recuerdo bien a bien cada detalle, en algún momento sonó mi celular, un LG anterior al Chocolate, negro, feo, chiquito, calificativos que no sólo en un celular suenan inconvenientes. Pero a mi me gustaba. No se como consiguió mi celular, el hecho de que se tomara la molestia de hacerlo y creerme lo suficientemente importante en su vida para suponer que yo podría informarlo significó mucho para mi.
Contesté. Y él con su voz grave, tranquilo pero usando el tono de que alguien había muerto derrepente, me explicó con pocos detalles que aquel había huido. Me propuse ir a buscarlo sin saber a donde, lloré a propósito porque sabía que la única manera de obtener ayuda sería haciéndole berrinche a mi mamá. Cuando la encuentro platicando en la calle, llega, guitarra al hombro y un cigarro entre los labios. Marlboro rojos, igual que yo. Impregnado de olor a lluvia y calle, con su chamarra negra de cuero.
No pude evitar sobreactuar, aprovechando los ojos medio llorosos, y lo abracé como si acabara de llegar de la guerra. Y ahí comenzaron los siete meses de mi vida que más me han costado descifrar.
Once upon a time, happily never after...
Te odio.
No comments:
Post a Comment